DISTORSIONES COGNITIVAS: CONCEPTO Y TIPOS



Las distorsiones cognitivas son patrones de pensamiento automáticos y sesgados que afectan nuestra forma de interpretar la información y percibir la realidad. Estos patrones distorsionados pueden ser negativos, exagerados o irracionales, y nos perjudican al influir en nuestras emociones, comportamientos y toma de decisiones.

Las distorsiones cognitivas son consideradas errores en el procesamiento de la información, ya que nos llevan a interpretar las situaciones de manera incorrecta o irracional. Algunos ejemplos comunes de distorsiones cognitivas incluyen:



1. Pensamiento polarizado: Ver las cosas en términos extremos, sin considerar los matices o las posibilidades intermedias. Es pensar en términos de "todo o nada", sin reconocer las opciones intermedias.






2. Generalización excesiva: Sacar conclusiones generales a partir de un solo evento negativo. Por ejemplo, si cometemos un error en una tarea, podemos generalizarlo y creer que siempre seremos incompetentes.






3. Filtro mental: Centrarse únicamente en los aspectos negativos de una situación y filtrar o ignorar los aspectos positivos. Esto puede llevar a una visión pesimista y distorsionada de la realidad.





4. Lectura del pensamiento: Asumir que conocemos los pensamientos y motivaciones de los demás sin tener evidencia clara. Esto puede llevar a malentendidos y conflictos en las relaciones interpersonales.




5. Catastrofización: Exagerar la importancia o el impacto negativo de un evento o situación, anticipando lo peor y subestimando nuestra capacidad para enfrentarlo.





Estas distorsiones cognitivas nos perjudican al generar emociones negativas como ansiedad, tristeza, ira o frustración. También pueden influir en nuestros comportamientos, ya que tendemos a actuar de acuerdo con nuestras creencias distorsionadas. Además, las distorsiones cognitivas pueden afectar nuestra toma de decisiones al basarlas en información sesgada o irracional.


Es importante ser conscientes de estas distorsiones cognitivas y trabajar en desafiar y reemplazar estos patrones de pensamiento negativos por pensamientos más realistas y equilibrados.

FUENTES:

1. Beck, A. T. (1976). Cognitive therapies
and emotional disorders. New York: International Universities Press.

2. Burns, D. D. (1980). Feeling good: The new mood therapy. New York: William Morrow and Company.

3. Ellis, A., & Harper, R. A. (1975). A new guide to rational living. Englewood Cliffs, NJ: Prentice-Hall.

4. Leahy, R. L. (2003). Cognitive therapy techniques: A practitioner's guide. New York: Guilford Press.

5. McKay, M., Davis, M., & Fanning, P. (2011). Thoughts & feelings: Taking control of your moods and your life. Oakland, CA: New Harbinger Publications.


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